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Identificar los diferentes tipos de cabello que existen y ver cuál se identifica más al tuyo es la mejor forma de poder darle los cuidados que necesita.
¿Cómo se determinan los diferentes tipos de cabello?
Los diferentes tipos de cabello están establecidos en función del patrón que sigue, en base a la ondulación de las hebras. Según la forma de los folículos capilares podría ser lacio, ondulado, rizado o crespo. Los folículos del cabello lacio son redondos y cuánto más ovalados o asimétricos sean, más rizado será el cabello.
Igualmente, el tipo de cabello viene determinado por la genética y la única forma de modificar el patrón, es a través de un proceso químico o el uso de herramientas de calor. También existen otro tipo de cambios producidos por alteraciones hormonales o la ingesta de determinados medicamentos.
Tipos de cabello
Lacio
No tiene rizos naturales y las fibras pueden ser finas o bien gruesas, pero caen rectas desde la raíz hasta la punta. Normalmente es el más resistente y el que tiene más brillo.
Es bueno lavarlo con frecuencia para de esta forma poder eliminar el exceso de sebo. Deben utilizarse champús ligeros, sin sales ni aceites pesados y para controlar el encrespado tan común en este tipo de cabellos, se puede utilizar algún producto específico.
Tipos de cabello lacio:
- Cabello delgado y poco voluminoso.
- Cabello medianamente grueso y con raíces que mantienen volumen.
- Cabello resistente y grueso, con facilidad para encresparse.
Ondulado
Posee características, en cuanto a brillo y textura, entre las de un pelo lacio y rizado. Si es fino, se puede trabajar facilmente, pero si es grueso es más complicado de manejar.
Los champús, acondicionadores y mascarillas deben tener un efecto hidratante y no ser demasiado pesados. Es recomendable utilizar fórmulas con extractos de frutas, vegetales y hierbas.
Para sellar la humedad, se deben aplicar aceites ligeros de semillas de uva, linaza o mostaza de medios a puntas.
Tipos de cabellos ondulados:
- Ondas ligeras: desde la raíz hasta el nivel de los ojos, el cabello suele ser lacio y en adelante posee ondas sueltas. Suele ser cabello fino.
- Ondas suaves: las ondas también van de medios a puntas, en este caso son más marcadas que en el anterior. Suele tener un grosor intermedio.
- Ondas definidas: las ondas son más definidas y comparte características con el pelo rizado. En este caso pueden comenzar ya en la coronilla y el cabello suele ser más grueso y propenso a encresparse con la humedad.
Rizado
Normalmente es voluminoso y propenso a los daños, aunque dependerá de los factores medioambientales.
El objetivo es mantener la humedad, por lo que se recomienda utilizar productos específicos para este tipo de cabello, con aceites e ingredientes altamente hidratantes. Los mejores aceites para su cuidado son de jojoba, almendra, argán, coco y oliva.
A diferencia de otros, se peina mejor cuando está húmedo y el uso de productos que funcionan con calor reseca su estructura y lo deteriora con el tiempo.
Tipos de cabellos rizados:
- Rizos abiertos: formado por bucles sueltos en forma de S.
- Rizos espirales: son rizos más espiralizados que surgen ya en las raíces y son voluminosos y densos.
- Rizos apretados: tienen una forma parecida a la espiral de un sacacorchos y son muy gruesos y voluminosos.
Crespo
A pesar de que puede parecer grueso, es frágil y quebradizo. Tiene una alta densidad y se encoge cuando está mojado ya que tiene menos capas de cutícula que otros tipos de cabello. Es más sensible al daño.
No debe lavarse muy a menudo con champú y se debe aplicar acondicionador mientras esté húmedo para así poder mantenerlo fresco. También es importante aplicar lociones para poder manejarlo, ya que necesita mucha humedad adicional.
Tipos de cabellos crespos:
- Espirales definidas: es delgado y muy susceptible al maltrato.
- Rizos en zigzag: es complejo de manejar y se encoge facilmente.
- Rizos muy apretados: es el más rebelde y resistente de todos, son muy difíciles de peinar y tienden a dejar ir la humedad.
Independientemente del tipo de pelo que se tenga, es importante cuidarlo no sólo con productos que actúen desde el exterior, sino también con un complejo vitamínico que ayude actuando desde el interior.
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