Polifenoles: Qué son, beneficios y dónde encontrarlos

¿Qué son los polifenoles?
Los polifenoles son conocidos como antioxidantes de origen vegetal. Son considerados las sustancias no nutritivas más presentes en los alimentos, se encuentran concretamente en las plantas.
Son compuestos carentes de función nutritiva, no hacen aporte calórico y no actúan como vitaminas o minerales, pero si constituyen sustancias bioactivas que impactan de diferentes maneras en el cuerpo y en su funcionamiento.
A nivel estético también ayudan a reducir los signos del envejecimiento y combaten los efectos del estrés provocado por la exposición a los rayos UV.
Beneficios de los polifenoles
Los polifenoles ayudan a:
- Reducir el efecto de los radicales libres.
- Mantener la función y estructura celular.
- Prevenir enfermedades cardiovasculares, diferentes tipos de cáncer, diabetes, osteoporosis y enfermedades degenerativas.
- Actúan como antioxidantes en el organismo y, además, cumplen una función vasodilatadora, antiinflamatoria, antitrombótica y antiaterogénica.
- En algunos casos actúa sobre la flora intestina y cumple una función prebiótica, es decir, constituye un sustrato para las bacterias beneficiosas del intestino reforzando la barrera de defensas del cuerpo.
- Por su función antiinflamatoria es que pueden contribuir a disminuir el riesgo de sufrir enfermedades metabólicas y también otras patologías como la artritis.
- Son capaces de regular la grasa corporal.
¿Dónde encontrarlos?
Existen numerosos tipos de polifenoles, pero la mayor parte de ellos se encuentran en las frutas, las legumbres y los vegetales coloridos. Cuanto más crudos y coloridos, mejor.
Principales fuentes de polifenoles:
- Frutas y verduras, concretamente en las de color rojo o morado como la remolacha, la berenjena, la col lombarda, la granada y las uvas
- Legumbres y cereales integrales.
- Col, cebolla, ajo, pimiento y tomate, con alto efecto antioxidante.
- Chocolate, aceite de oliva virgen extra o cerveza.
- Especias como la menta seca o el anís estrellado.
- Frutas del bosque como los arándanos, las moras, las fresas y las frambuesas.
- Frutos secos.
- Bebidas como el vino o el té, que tienen un alto contenido de catequinas.

Respecto a este último punto, mencionar que una buena opción para consumir este antioxidante tan beneficioso, es incluir en nuestra dieta y rutina diaria un té, concretamente té negro ya que los polifenoles que se encuentran en el té negro ayudan a mantener una flora bacteriana saludable, reduciendo la incidencia de infecciones como la salmonela y promoviendo las bacterias buenas.
Una opción perfecta es el Té negro de Matcha & CO. El té negro es la variedad de té con un grado de oxidación del 100%, lo que resulta en un atrayente color oscuro. Con el objetivo de obtener todas sus propiedades y nutrientes molemos las hojas del té hasta convertirlas en un polvo fino, perfectas para disolver en agua, leche o bebida vegetal.
